Aversión condicionada al sabor

En esta entrada veremos en qué consiste el procedimiento experimental de aversión condicionada al sabor.

Introducción

Los psicólogos experimentales han tratado de estudiar el condicionamiento clásico en el laboratorio. A partir de los primeros trabajos con perros, en las investigaciones se han ido incorporando otros muchos animales. Por ejemplo: ratas, palomas, conejos, cobayas, etc.. Este estudio ha permitido conocer mejor algunos aspectos de la conducta de los animales, ayudando a desarrollar la Etología. Esta ciencia estudia el comportamiento animal tanto en condiciones de libertad, como en laboratorio.

Sin embargo, estos trabajos también nos ayudan a comprender mejor algunos aspectos del comportamiento humano. Por ello, sirven de base para el desarrollo de numerosas técnicas de modificación de la conducta humana en situaciones en las que esta puede ser útil para los individuos. Por ejemplo, en el tratamiento de fobias, de aversión a algunos alimentos, en la reducción de la ansiedad, etc.

Procedimiento de aversión condicionada al sabor

Esta técnica se lleva a cabo presentando al individuo un sabor que le resulta nuevo al mismo tiempo en el que se administra una sustancia que le hace sentir mal. Por ejemplo, pensemos en un enfermo de cáncer que recibe quimioterapia (EI) y al mismo tiempo prueba una nueva tarta de manaza (EN).

Tras sentir náuseas por la quimioterapia (RI), es muy probable que desarrolle una aversión condicionada al sabor de la tarta de manzana (EC). Esta sensación de náuseas a la tarta de manzana será su RC.

Una característica de la aversión condicionada al sabor es que en ocasiones es suficiente un único ensayo para adquirir este aprendizaje.

Además, al contrario de lo que ocurre con los otros procedimientos de condicionamiento clásico, el intervalo temporal entre la presentación del estímulo condicionado y la aparición del estímulo incondicionado puede ser de varias horas. Para el resto de procedimientos no debe exceder de unos segundos.

Esto tiene mucha lógica desde un punto de vista evolutivo, porque no tendría sentido que un animal tuviera que probar varias veces un alimento para saber si es venenoso o no, porque podría perecer antes de finalizar estos intentos.

Es mucho más adaptativo que ante la primera ingesta, el animal (o el humano) sepa que se debe privar de tomar determinadas sustancias o comidas, dado que pueden ser perjudiciales para su bienestar.

En el laboratorio se suelen utiliza como EN el agua con sacarina o jarabes de diferentes sabores, y como EI diferentes sustancias o estímulos que provocan náuseas o malestar en los sujetos. Algunos ejemplos son: inyecciones de cloruro de litio, exposición intensa a rayos X, ciclofosfamida, etc.